En
general, las organizaciones que operan a través de un modelo de
ministerio pagado difiere, en varias maneras, del modelo de La Iglesia
de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. En un
modelo de ministerio pagado, la persona a menudo decide obtener
capacitación (un grado) y, a continuación, postula a un trabajo como
ministro. Su salario generalmente depende de la congregación (si se
trata de una gran iglesia, éste puede ser generoso, y si se trata de una
pequeña iglesia rural puede ser muy modesto).
La Iglesia opera a traves de un modelo de sacerdocio laico, con pocas
excepciones. Los oficiales de la Iglesia llaman a los miembros a servir
en una posición de liderazgo sin indemnización durante un período
determinado de tiempo y sin ningún tipo de capacitación especial o
grados. Estos miembros continúan en su trabajo y sirven en la Iglesia
mientras no están trabajando. Estas personas aceptan llamamientos y los
cumplen como parte de su compromiso con Jesucristo, a sabiendas de que
en algún momento serán relevados de su papel de liderazgo, y que otro
miembro local será llamado a tomar su posición. Un día una persona puede
servir como un obispo (un líder en una unidad local) y al día siguiente
ser relevado y llamado a enseñar a los niños.
Sin embargo, un pequeño número de líderes
de la Iglesia que son llamados a servir a tiempo completo recibe un “estipendio de subsistencia.” Ellos no obtienen ninguna formación especial o grados, y no postulan a un puesto. Cuando son llamadas por los oficiales de la Iglesia, dejan su trabajo a tiempo completo y, por lo general, se mudan a una nueva ubicación para cumplir con su nueva asignación según las instrucciones de sus líderes. Aquellos llamados a un servicio de tiempo completo comprenden cerca de 350 presidentes de misión, que prestan servicio por un período de tres años y, cerca de 100 Autoridades Generales, que prestan servicio a tiempo completo en la sede de la Iglesia, por diversos períodos de tiempo. De este último grupo, quince profetas, videntes, y reveladores sirven hasta que mueren. Algunas Autoridades Generales son muy acomodados económicamente y no necesitan un estipendio. La práctica actual de proporcionar un estipendio a un número limitado de personas por un período determinado, permite a la Iglesia llamar a personas de un grupo más amplio que las que son muy acomodadas económicamente. Una vez que los presidentes de misión y algunas Autoridades Generales son relevadas de sus llamamientos, vuelven a su empleo o se mudan donde deseen. A su regreso, a menudo son llamados a servir como líderes laicos en la organización local de la Iglesia.
de la Iglesia que son llamados a servir a tiempo completo recibe un “estipendio de subsistencia.” Ellos no obtienen ninguna formación especial o grados, y no postulan a un puesto. Cuando son llamadas por los oficiales de la Iglesia, dejan su trabajo a tiempo completo y, por lo general, se mudan a una nueva ubicación para cumplir con su nueva asignación según las instrucciones de sus líderes. Aquellos llamados a un servicio de tiempo completo comprenden cerca de 350 presidentes de misión, que prestan servicio por un período de tres años y, cerca de 100 Autoridades Generales, que prestan servicio a tiempo completo en la sede de la Iglesia, por diversos períodos de tiempo. De este último grupo, quince profetas, videntes, y reveladores sirven hasta que mueren. Algunas Autoridades Generales son muy acomodados económicamente y no necesitan un estipendio. La práctica actual de proporcionar un estipendio a un número limitado de personas por un período determinado, permite a la Iglesia llamar a personas de un grupo más amplio que las que son muy acomodadas económicamente. Una vez que los presidentes de misión y algunas Autoridades Generales son relevadas de sus llamamientos, vuelven a su empleo o se mudan donde deseen. A su regreso, a menudo son llamados a servir como líderes laicos en la organización local de la Iglesia.
El dinero para los estipendios de subsistencia proviene de los
ingresos producidos por las empresas en las que la Iglesia tiene
inversiones. Hasta ahora, por lo menos, no se ha utilizado los pagos de
diezmos para este fin. El importe de los estipendios de los presidentes
de misión depende de las necesidades y circunstancias (las misiones en
la ciudad de Nueva York y Londres son más caras que en otros lugares).
Curiosamente, todas las Autoridades Generales reciben el mismo
estipendio: el Presidente de la Iglesia recibe el mismo estipendio que
un miembro del Primer Quórum de los Setenta. Cabe mencionar que hay un
pequeño extra para algunos que tienen hijos a su cargo (una cantidad x
de dólares por niño). Se espera que el estipendio permita un estilo de
vida cómodo, pero modesto.
El modelo de la Iglesia de otorgar un estipendio de subsistencia se
basa en diversas referencias de las Escrituras “porque el obrero es
digno de su salario”, un principio que se aplica tanto a asuntos
temporales como espirituales (véase Doctrina y Convenios 31:5; 106:3;
24:3, 7,9; 41:7 , y 42:70-73).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
!Muchas gracias por tus comentarios!Cualquier duda o sugerencia hazlo llegar a richitar20@gmail.com
Si publicas un link usa esta linea de codigo.Gracias=D
<a href="url-de-la-página">Texto enlace</a>