
Hablamos de ello durante un momento, y en respuesta a sus preguntas les dije que nadie sabe exactamente cuándo vendrá Cristo nuevamente. Una de mis amigas se volvió hacia mí y me dijo muy seriamente: “Jade, si la Segunda Venida sucede pronto y Jesucristo viene, puede que no le reconozca. ¿Me mostrarás quién es?”. Le dije que por supuesto que sí, y después pasamos a hablar de otras cosas. Quizá mis amigas nunca volvieron a pensar en aquella conversación, pero yo he pensado en ella muchas veces. Teniendo en cuenta lo que yo decía y hacía, mis amigas supusieron que yo conocía al Salvador. De hecho, ¡contaban con que yo lo conociera! ¿Pero realmente lo conozco? ¿Podría responder afirmativamente a la pregunta de Alma: “¿Habéis recibido su imagen en vuestros rostros?” (Alma 5:14)?
Aquella pregunta informal de mi amiga me ha motivado a evaluar mi relación con el Salvador muchas veces. Por ejemplo, ¿son mis oraciones personales y mi estudio de las Escrituras lo suficientemente significativos para acercarme a Él? Así lo espero. También espero que un día, cuando Cristo venga, pueda presentarme ante Él con un corazón puro y manos limpias.
Entonces no sólo podré reconocerle fácilmente, sino que Él también me reconocerá, puesto que llevaré Su imagen grabada en mi semblante (véase Alma 5:19). ■
Por JADE SWARTZBERG
Liahona septiembre 2007
Bonito mensaje cdlcp gracias =). Es muy cierto conocer al salvador, no es solo el simple hecho de decir lo conosco, requiere muchas cosas, saber su vida, tratarlo de imitarlo, seguir su camino, imitarlo,seguir su ejemplo perfecto y muchas cosas mas. Esa pregunta me hizo pensar mucho, de como va nuestra relación con respecto a Dios. Hay mucho que hacer =)
ResponderEliminarBonita historia, conocerlo va mas alla de saber de El... es hacer y ser como El!
ResponderEliminar